El cuidado de la piel es parte del cuidado de nuestra salud. Aquí compartimos contigo estos tips para lucir una piel saludable.
El primer paso es identificar y comprender tu tipo de piel
- La piel sensible puede picar o quemarse después del uso del producto.
- La piel normal es clara y no sensible.
- La piel seca es escamosa, pica o áspera
- La piel grasa es brillante y oleosa
- La piel mixta es seca en algunas zonas y grasa en otras
Comprender tu tipo de piel te ayudará a aprender cómo cuidarla y seleccionar los productos para el cuidado de la piel adecuados para ti.
Para mantener una piel saludable, los dermatólogos recomiendan los siguientes consejos
Use protector solar todos los días. El protector solar es una de las cosas más importantes que puede hacer por su piel. Cuando se aplica correctamente, el protector solar protege su piel contra los dañinos rayos ultravioleta (UV) del sol, que causan quemaduras solares, cáncer de piel y envejecimiento prematuro de la piel, como arrugas y manchas de la edad.
Para lograr la mejor protección, aplica un protector solar de amplio espectro resistente al agua con un SPF de 30 o más en toda la piel que no esté cubierta por la ropa y vuelve a aplicar cada dos horas o después de nadar o sudar. Para ahorrar tiempo en tu rutina de cuidado de la piel, puedes considerar usar un humectante que también contenga protector solar. Sin embargo, si bien los cosméticos que contienen protector solar son convenientes, recuerda volver a aplicarlos para lograr la mejor protección solar. Tenga en cuenta que dado que ningún protector solar puede bloquear el 100 % de los rayos UV del sol, También es importante buscar la sombra y usar ropa protectora contra el sol cuando esté al aire libre, incluida una camisa ligera de manga larga, pantalones, un sombrero de ala ancha y anteojos de sol con protección UV, cuando sea posible. Para una protección solar más efectiva, seleccione ropa con una etiqueta de factor de protección ultravioleta (UPF).
Evita las camas de bronceado. Al igual que el sol, las camas de bronceado emiten radiación ultravioleta dañina que causa cáncer de piel. De hecho, incluso una sola sesión de bronceado en interiores puede aumentar el riesgo de desarrollar melanoma en un 20 %, carcinoma de células escamosas en un 67 % y carcinoma de células basales en un 29 %. Si quieres ese brillo dorado, consíguelo con productos autobronceadores. Cuando se aplican correctamente, los autobronceadores se ven naturales y no te darán piel de naranja, rayas ni manchas.
Simplifica tu rutina de cuidado de la piel. Menos es más cuando se trata del cuidado de la piel. El uso de demasiados productos, especialmente múltiples productos antienvejecimiento, puede irritar la piel. En su lugar, concéntrese en lo básico, como un limpiador suave, protector solar y humectante. Establecer rutinas de cuidado de la piel por la mañana y por la noche que funcionen bien para tu piel, y trata de ser constante.
Elige productos para el cuidado de la piel formulados para tu tipo de piel. Comprender tu tipo de piel te ayudará a aprender cómo cuidarla y seleccionar los productos para el cuidado de la piel adecuados para ti, puedes consultar sobre las mejores cremas de Primor.
Como se mencionó anteriormente, aquí te explicamos cómo identificar y comprender tu tipo de piel
- Piel sensible: Puede picar o quemar después del uso del producto
- Piel normal: Clara y no sensible
- Piel seca: escamosa, con picazón o áspera
- Piel mixta: Seca en algunas zonas y grasa en otras
- Piel Grasa: Brillante y oleosa.
Trata tus labios. Dado que se puede formar cáncer de piel en los labios, aplique un bálsamo labial o lápiz labial que contenga protector solar con un SPF de 30 o más antes de salir al aire libre. Si siente los labios agrietados o secos, aplique vaselina para humectarlos.
Mantén tus manos fuera de tu cara. Cada vez que te tocas la cara, transfieres suciedad, gérmenes y grasa de tus manos a tu cara.
Evita pellizcar, reventar o apretar las espinillas, ya que esto puede causar cicatrices.
Revisa tu piel regularmente. El cáncer de piel es el cáncer más común de lo que pensamos. Cuando se detecta temprano, el cáncer de piel, incluido el melanoma, es altamente tratable. De hecho, la tasa de supervivencia a cinco años para las personas cuyo melanoma se detecta y trata antes de que se propague a los ganglios linfáticos es del 98 %.
Es importante revisar tu piel con regularidad para ver si hay manchas nuevas, manchas que son diferentes de otras manchas en su cuerpo o lunares que pican, sangran o cambian de color, ya que estos suelen ser signos de advertencia tempranos de cáncer de piel.
Si notas alguna mancha sospechosa, programa una cita para ver a un dermatólogo.
Recuerda que la piel es el órgano más grande de tu cuerpo, por lo que es importante cuidarla bien. Si tienes dudas sobre tu tipo de piel o sobre cómo cuidarla, habla con un dermatólogo.
